¡¡Buenas a todos!! Queremos aprovechar este frío finde sin fútbol para narraros cómo hicimos el tifo del pasado derbi, y que podáis así matar un poco el gusanillo de BETIS.
Desde primera hora, teníamos claro que había que hacer algo espectacular, pues en el último derbi en casa, al ser en las primeras jornadas de liga, se nos echó el tiempo encima, y lo que hicimos fue la frase de Jose Juán Romero acompañada del escudo del club, que en principio iba acompañada de algo más, pero no nos llegaron a tiempo los materiales; además, en el anterior derbi en casa, todos sabemos lo que pasó con el tifo… entre el viento que entraba ese día por el lateral, la plataforma de la cámara de TV y que la gente no acompañó en el despliegue (tirones, movimientos bruscos y tal) se fue al traste el trabajo de semanas y semanas.
Por todo ello, este derbi tenía que servir para sacarnos esa espinita que teníamos clavada, y desde el minuto uno nos propusimos hacer algo ambicioso, bastante grande, que quedase para el recuerdo. Tras alguna que otra reunión desde el comienzo de liga, muchas propuestas, ver muchos tifos y demás, lo decidimos: tenía que ser un tifo en el que aparecieran emblemas y símbolos de la ciudad de Sevilla y del Real Betis Balompié, que para eso estábamos tramando un tifo de un derbi. Elegimos dos figuras importantes para nuestra ciudad, como son las estatuas del Rey San Fernando, de la Plaza Nueva, y la estatua del Cid Campeador, que encontramos frente al Rectorado.
Además, aprovechando que en GOL SUR 1907 tenemos un banderón con el escudo del BETIS acompañado del de la Ciudad de Sevilla, veíamos que esta era la ocasión perfecta para utilizarlo y hacerlo a lo grande. para los más rebuscados, incrédulos o criticones… ¡NO, no nos hemos sacado un escudo de la manga! Lo hemos tomado de un antiguo azulejo del Rectorado, que se encuentra en la fachada exterior. Os animamos a buscarlo, como si del pajarito del azulejo de la iglesia de San Pedro se tratase.
Una vez decidido el diseño, aproximadamente un mes antes del derbi, nos pusimos manos a la obra para pasar las más de 700 cuadrículas a la tela. Tardes y tardes marcando la tela, los colores en los que se debía pintar y demás. Tened en cuenta que el diseño tenía unos 30 metros de alto X 57 de ancho. Un trabajo de chinos, pero necesario para que más tarde, cada detalle resalte de forma adecuada y hagan del tifo un perfecto “lienzo”.
A la misma vez que se iban marcando con rotuladores las tiras de tela, unos cuantos nos poníamos con la costura, ardua tarea. Las tiras irían en vertical. Primero se encajaba una tira con la siguiente, viendo que las marcas hechas con rotulador encajasen y posteriormente comenzábamos a unirlas. En total, 35 tiras verticales que harían los 57 metros que tenía el tifo de ancho. Al principio, muy bien. La máquina iba como la seda y no podíamos quejarnos. Pero pronto empezaron los problemas: la aguja se rompía, la máquina se atascaba e incluso alguna pieza se partió. Estuvimos más de una semana sin coser, con la máquina en el taller. Tiempo que aprovechamos para seguir marcando tela y avanzar en otras cuestiones. Volvió la máquina de coser, y con ella, los problemas, pues volvió a romperse. Pero entre las dos visitas al taller, pudimos coser todo el tifo en poco menos de una semana. Aquí os dejamos una fotos del tifo ya cosido, desplegado a lo ancho casi al completo.
Una vez cosido el cubregradas central, venía lo gordo: pintarlo. Un diita para preparar todos los materiales, hacer inventario, comprar las pinturas, tintes, materiales y plástico, mucho plástico para cubrir el suelo y evitar que se manchase de pintura.
Debemos destacar que no se comenzó a pintar el tifo hasta el Jueves 31 de Octubre, pues el Miércoles 30 el BETIS jugaba en casa con el Celta de Vigo, y el Parking tenía que estar libre, obviamente, para los abonados que aparcan allí, y el hecho de pegar plásticos al suelo, desplegar tifo, pintar, cubos de pintura y materiales de por medio, etc. y tener que recogerlo todo el martes antes del partido, para volver al curro el día después, sinceramente, no nos rentaba. Por ello, hasta una semana y pico antes del derbi no se comenzó a pintar.
Aquí llegaba un problema importante. Mejor dicho, dos: el tiempo y el espacio. Sólo teníamos 1 semana, y sólo podíamos desplegar 8 metros de alto X 46 de ancho para pintar al día, que es lo que veis desplegado en la foto de arriba. Es decir, que tendríamos que hacer el tifo en 4 partes a lo ancho, pero además, la parte izquierda (la parte de abajo en la foto) la cual medía los 30m de alto X 9m de ancho, quedaría sin pintar. Además, a la hora de corregir detalles, ver si las líneas rectas estaban realmente rectas y demás, sería un engorro, pues la no ser diáfana la superficie, para pintar lo siguiente teníamos que recoger lo que ya estaba pintado.
El primer día de curro, con las pilas bien cargadas, se completó toda la superficie que había extendida. También cabe decir que era la parte más sencilla del tifo: pocos colores, mucho rulo verde y blanco y a rellenar a lo grande. Aquí abajo os dejamos dos fotos de lo que se pintó el primer día de trabajo. Como os podéis imaginar, se comenzó muy temprano, se acabó muy tarde y trabajaron muchas personas.
El segundo día de trabajo teníamos bastante curro por delante, pero era viernes, fiesta, y la gente respondió bien. Desde por la mañana estábamos un buen número de gente con el tifo. Ya entrábamos en algunos detalles más complejos de los dos escudos y de los tonos de grises, que había que ir comparando con el diseño original y demás, para ver si todo cuadraba a la perfección. Lo bueno de que el tifo fuese tan grande, es que todo era a lo bestia, por lo cual el pequeño descuadre que pudiese existir, era mucho menor y más fácil de corregir sobre la marcha. Con la superficie del Día 1 ya seca, nos ponemos a despegarla del plástico para comenzar con la del Día 2. Cual topos terrestres, unos cuantos tíos se meten bajo el tifo para despegar las partes centrales, a las que no llegábamos levantando los bordes del tifo. Reforzamos las juntas de los plásticos para que estuviese de una pieza y evitar pintar el suelo y comenzamos a desplegar la superficie de tela sin pintar que nos tocaba ese día, la cual casi terminaríamos al final del mismo.
Tras un largo día de curro, siendo viernes, festivo, y habiéndonos quedado sin pintura verde y blanca, decidimos parar. Sólo quedaban unos pequeños detalles, y lo que iba de verde y de blanco, que no se pudo pintar. Además, algunos de nosotros iríamos al día siguiente a Madrid a animar al BETIS en el Bernabéu, y aunque a veces parezca que no, nosotros también tenemos vidas, familias, novias, amigos, etc… Se dejó tal cual, para que aquellos que se quedasen en Sevilla el sábado 2 de noviembre, pudieran continuar con el trabajo, por poco que fuera. Estos tuvieron que terminar con los detallitos del escudo de Sevilla, el bordeado de los personajes que aparecen en el mismo y todo aquello que haría resaltar más y mejor las figuras. También completaron lo verde y lo blanco que se quedó por acabar el día anterior.
El siguiente día volvimos a la carga y repetimos el mismo proceso: despegar lo pintado el día anterior, recoger lo que se había pintado y desplegar lo siguiente que se tendría que pintar. Esta vez se tardó algo más de un día en pintar toda la superficie, pues ya teníamos muchos más detalles de grises y ambos escudos. una vez teníamos pintado el tifo casi al completo de arriba hasta abajo, excepto unos metros que faltaban, así como el rectángulo que comentamos al inicio, llegaba el momento de coser unos “dobladillos” en el borde superior del tifo. En estos dobladillos introduciríamos palos de PVC, de los cuales tiraríamos con cuerdas para elevar el tifo del 1er al 2º anillo el día del derbi.
En la foto de abajo veremos una pequeña parte del tercer tercio del tifo ya pintado, y antes de comenzar con la 4ª fue cuando se cosieron esos dobladillos en todo el ancho del tifo, en su borde superior.
Ese mismo día, tras coser todos los dobladillos, se pintó la parte superior del tifo, que era bastante sencilla, pues mayormente era verde, con pocos detalles de grises y de los dos escudos. A la vez que se completaba la franja superior, algunos nos pusimos a coser un dobladillo similar al que íbamos a utilizar en este tifo, pero al tifo de Rubén Castro que sacamos a principio de Agosto, el cual utilizaríamos para probar el mecanismo de cuerdas y palos de PVC con el que pretendíamos sacar el tifo el día 10 de noviembre.
Completado el trabajo que tocaba ese día, nos fuimos, dejando el tifo extendido. Grave error. Lógicamente, ninguno de nosotros se percató de que esa madrugada llovería bastante, y cual fue nuestra sorpresa al llegar al día siguiente al estadio y ver algunos charcos grandes en dos zonas del tifo. Por suerte, pudimos solucionarlo, empapando retales de tela y algunas lonas en el agua de los charcos, así como con unos sopladores de viento de estos que se usan para “barrer” en los estadios, en plan cazafantasmas.
Aunque perdimos toda la mañana secando el tifo y poniendo algún que otro mecanismo (nos lo guardamos) para que las goteras no nos jodieran el tifo, pudimos continuar a partir del medio día. Recogimos el tifo, ya pintado casi al completo de arriba hasta abajo, para cambiar la orientación y desplegar tan sólo la parte que faltaba por pintar, que en este caso era la parte de El Cid casi al completo.
En esta última tarde-noche de trabajo se terminó de pintar el rectángulo de El Cid al completo, además de coser la frase que acompañaría al tifo y comenzar a pintarla, sin que pudiésemos terminarla, pues hubo gente que se quedó currando hasta altas horas de la madrugada y algunos llevábamos desde las 11 de la mañana allí…por poco no hizo más de uno las 24 horas. Aun así, se dejó bien tapada para que ningún curioso pudiese husmear por allí, tomar fotos y demás, y al día siguiente, o a la tarde siguiente, mejor dicho, nos volvimos a poner manos a la obra.
Hablamos ya de la tarde del viernes previo al partido, en la que se terminó de pintar la pancarta, colocarle los palos, preparar las cuerdas para el tifo central, etc. Destacar que la pancarta de la frase, de unos 60 metros de largo X 3 de alto, contaba con 30 palos de PVC, es decir, necesitaríamos al menos 30 personas para elevarla en el momento de el himno.
El día previo al partido, fue de pruebas y preparativos. Por la mañana y hasta las 5 de la tarde, antes del entrenamiento a puerta abierta, terminamos de preparar las cuerdas, los palos con los que elevaríamos la frase, y colocamos también al tifo de RC24 los palos y cuerdas necesarios para hacer la prueba. Se recortó al tifo de Rubén el rectángulo para que encajase con la plataforma de Televisión y no existiesen roces y roturas de tela. Aquí abajo podemos ver una foto de la prueba.
Tras un rato probando, subiendo y bajando el tifo, desplegándolo y recogiéndolo, vimos algunos errores, algunas cosas que podrían fallar, y otras que se podrían mejorar un poco más. Con lo cual, la prueba del tifo fue clave para que al día siguiente, todo saliera perfecto y no hubiese nada que lamentar. Por la noche, volvimos a seguir colocando las cuerdas que servirían de sostén al tifo, es decir, nos servirían de apoyo para deslizar por encima de ellas los palos de PVC con el tifo desde el 1er anillo hasta el segundo. Trabajo que continuamos haciendo en la mañana del partido. Desde bien temprano, continuamos con las cuerdas, tanto las de apoyo, como las cuerdas de las cuales tiraríamos para elevar el tifo. Estas últimas eran unas 50 en total, es decir, arriba, en el 2º anillo tendríamos que tener a 50 personas tirando de las cuerdas para elevar el tifo, lo que sumado a los 30 de la frase hacen un total de 80 personas para desplegar todo a la perfección.
Todo ello sin contar con la gente del primer anillo y los de la grada baja. Algo impresionante, por lo que la organización y coordinación era un punto clave que debíamos reforzar. ¿Cómo lo hicimos? En las horas previas al encuentro, pudimos hacernos con varios walkis, que nos permitieron estar en contacto en todo momento entre los 3 anillos de Gol Sur. Uno de nuestros speakers tenía uno, una persona en el primer anillo de gol sur tenía otro, y en el segundo anillo teníamos dos: uno para quien coordinaba las cuerdas, velocidad y demás, y otro para quien se encargaba de la pancarta de la frase.
Muchos, muchísimos nervios en los minutos previos al despliegue del tifo. El viento, nuestra principal preocupación. No os imagináis cómo soplaba allí arriba en el segundo anfiteatro. Los abonados de Gol Sur 2º anfiteatro, nuestros grandes aliados. Desde estas líneas, agradecer el buen trato, comprensión y la ayuda que nos brindaron en todo momento, porque sin su ayuda posiblemente no hubiera sido posible. ¡Se portaron de DIEZ!
Pocos detalles más os podemos dar de lo que ha dado de si la realización de este tifo, con todo el trabajo, esfuerzo y dedicación que ello conlleva. En definitiva, un mes de nuestras vidas entregado al BETIS, mucho curro, agobios, mucho tiempo y dinero invertido, muchos problemas e inconvenientes, que afortunadamente pudimos superar, para regalarle a todos los béticos algo que quedará para el recuerdo, ya que ha sido de lo mejorcito que se ha hecho en el Benito Villamarín en cuanto a tifos se refiere. Al menos, para nosotros.
¿El resultado? Ya lo conocéis. Nuestra más sincera enhorabuena a todos aquellos que invirtieron algo de su tiempo para trabajar de forma desinteresada por y para el BETIS, por y para GOL SUR 1907, pues gracias al curro de todos juntos hemos hecho posible este pedazo de tifo. Gracias también a los grupos, peñas y particulares que siguen apostando por GOL SUR 1907, ya sea afiliándose o comprando el material, porque es parte fundamental para que podamos seguir haciendo cositas como estas, que no son baratas precisamente. Por todos ellos, esperamos poder seguir mejorando pasito a pasito, que esto sólo sea el comienzo y que pronto podamos dejar con la boca abierta al resto del beticismo. Sin más nos despedimos, hasta el próximo TIFOMANÍACOS! Un fuerte abrazo.
LARGA VIDA A LOS FANÁTICOS DEL REAL BETIS BALOMPIÉ
GOL SUR 1907 – TIFOMANÍACOS